Diciembre ha sido un mes de viajes, frío y nuevos proyectos. Una casualidad tras otra y algún que otro "empecinamiento" por mi parte, me han llevado a Dublín, a Hannover y a Uppsala, mi querida ciudad escandinava...
A pesar de mi política de "economía de equipaje" mis nuevas zapatillas de correr ASICS KAYANO me han acompañado en mis viajes y, a pesar del cansancio, el frío o la oscuridad de escandinava en esta época del año, salir a correr ha sido un aliciente en todos los viajes.
En Dublín, a pesar de la brevedad del viaje, pude salir a trotar bajo una fina lluvia por las márgenes del río Liffey, disfrutando de la sensación de correr con buena temperatura y sin agobios a pesar de no estar demasiado lejos de Temple...
En Hannover hacía un tiempo de perros, pero me dí el gustazo de correr hasta agotarme a través de los edificios de la facultad de veterinaria, sabiendo que en el hotel me esperaba un agradable radiador y una ducha calentita.
Pero, sin duda, un sitio para disfrutar corriendo por el bosque es Uppsala. El frío te perfora los pulmones hasta que se acostumbran a la temperatura, pero la sensación de sentirse vivo es inigualable... correr hasta sentir las piernas entumecidas por el frío y el cansancio, correr hasta que casi no sientes la cara ni las manos, pero el aire es tan limpio y la ciudad tan tranquila que dan ganas de correr y gritar. Y te sientes invencible en medio del bosque...
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